Mantenimiento de calderas según la ley

Publicado el : 05/08/2019 12:04:55
Categorías : Calefaccion , Construcción

mantenimiento de las calderas según la ley

   

Indice de Contenidos:

 

En muchos hogares de nuestro país es bastante habitual ver una instalación de gas con su correspondiente caldera y los radiadores para crear un ambiente confortable en invierno y obtener agua caliente. Sin embargo, alrededor de este sistema que es tan común existe un cierto desconocimiento sobre cómo y cuándo se debe realizar el mantenimiento. La mayoría de los usuarios no saben las inspecciones y revisiones que se deben hacer por ley, por lo que el riesgo sufrir un accidente o avería en la caldera es altamente probable. A esto se suma una cierta estafa debido a que muchos clientes están pagando por este tipo de servicios en sus contratos de suministro y finalmente no hacen uso de ellos.

Desde el cambio de normativa del año 2013, el Reglamento de las Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) establece lo siguiente:

  • La revisión de la caldera de gas es obligatoria cada dos años (un año en el País Vasco).
  • Si se trata de un calentador de agua, el plazo se amplía a 5 años hasta 24,4 kW o cada dos años si supera esta potencia hasta 70 kW.
  • En el caso de otro tipo de calderas, como las de gasóleo, eléctricas o pellet, la revisión es anual.
  • La inspección de la instalación de gas tiene que realizarse cada 5 años (4 años en el País Vasco).

No obstante, si el fabricante especifica un plazo inferior en el manual de mantenimiento, hay que ajustarse a lo que se indique en dicho documento.

 

¿En qué consiste la revisión de la caldera?

La revisión de las calderas de gas domésticas cuya potencia suele ser inferior a 70 kW es necesaria para comprobar la eficiencia energética del dispositivo y certificar que las emisiones de gases se encuentran dentro de los niveles correctos. Además, es imprescindible que en este mantenimiento se lleve a cabo un análisis de combustión para verificar que los valores entran dentro de la norma.

Gracias a un mantenimiento adecuado de la caldera se consigue que funcione sin ningún problema alargando su vida útil. Al mismo tiempo, se garantiza la seguridad y el confort en la vivienda, y supone un ahorro energético.

 

¿Quién debe realizar la revisión de la caldera?

Lo más recomendable es contratar este trabajo al Servicio Técnico Oficial de la marca de la caldera, ya que conocen al detalle todos los aspectos técnicos de la misma y están acostumbrados a solucionar los problemas más comunes. Además, en caso de que sea necesario sustituir algún elemento, este equipo dispone de los recambios originales. Generalmente, los fabricantes de calderas suelen ofrecer este tipo de servicio, por lo que solo hay que realizar una llamada o acceder a la web oficial para comprobarlo.

Si se desea, la revisión del gas también se puede encargar a la propia compañía del gas. En la actualidad, lo más normal es que este tipo de empresas ofrezcan la revisión de la caldera como parte del contrato, aunque el cobro de este servicio se factura aparte.

Por otro lado, existe la posibilidad de contratar un profesional cualificado o una empresa independiente que estén habilitados para realizar la revisión. En cualquier caso, el especialista que se encargue del trabajo debe contar con la condición de instalador de gas y agente de puesta en marcha, mantenimiento y reparación de aparatos a gas (APMR).

Independientemente de la elección, el técnico que realice la revisión del aparato debe expedir un certificado que es necesario conservar durante los próximos 2 años hasta que tenga lugar la siguiente comprobación. Junto a ello, el especialista también tiene que colocar una pegatina en la caldera donde se indiquen los datos de la inspección.

 

¿Cuánto cuesta la revisión de la caldera?

El control de este tipo de revisiones corresponde a las comunidades autónomos, aunque dentro de este contexto, el precio del servicio es totalmente libre, es decir, que cada compañía puede establecer las tarifas que considere. De media, el coste suele oscilar en torno a los 100 euros, aunque conviene pedir varios presupuestos antes de solicitar la inspección en un lugar concreto.

En este sentido, hay que tener en cuenta que si se incluye la revisión de la caldera dentro del contrato de suministro es posible acceder a precios más competitivos por el servicio de mantenimiento. Si se opta por esta vía, es aconsejable leer bien todas las cláusulas para estar al tanto sobre si las diferentes partidas, como mano de obra, servicio inmediato, sustitución de piezas, etc., están incluidas o no.

Es importante recordar que el consumidor es el responsable de contactar con una empresa para realizar el mantenimiento y que el abono del importe corre a su cuenta. Además, lejos de lo que se tiende a pensar, no es obligatorio suscribir un contrato de mantenimiento para este tipo de tareas.

 

¿En qué consiste la inspección de la instalación de gas?

Como hemos comentado antes, es preceptivo realizar esta inspección cada 5 años. Aunque se suele confundir a menudo con la revisión de la caldera, se trata de dos cosas diferentes e independientes. El objetivo de esta inspección es examinar que toda la instalación cumple con los requisitos exigidos por la ley para evitar posibles accidentes.

 

¿Quién debe realizar la inspección de la instalación de gas?

En este caso, es la propia compañía de gas la que se pone en contacto con el cliente para informarle de la necesidad de realizar dicha inspección en tiempo y forma. Normalmente, suelen enviar una carta con una antelación de 3 meses antes del momento en el que es preciso proceder a la revisión.

No obstante, el cliente tiene la posibilidad de contratar este servicio a través de otra empresa habilitada y homologada, en cuyo caso deberá notificarlo a la compañía que ofrece el suministro en un plazo máximo de 45 días. En el caso de que la distribuidora no reciba ninguna documentación donde se justifique que se ha efectuado la inspección de la instalación de gas, procederá a enviar a su propio personal para llevarla a cabo, avisando unos días antes de la fecha y la hora concretas. Hay que tener en cuenta que, en este supuesto, el cliente no se puede negar a que el equipo técnico inspeccione la instalación.

 

¿Cuánto cuesta la inspección de la instalación de gas?

A diferencia de la revisión de la caldera, las compañías distribuidoras de gas son las encargadas de velar por el cumplimiento de esta inspección cuando corresponda. En caso de optar por la empresa suministradora, el precio varía según la comunidad autónoma, registrándose grandes diferencias entre unas regiones y otras. A grandes rasgos, el coste suele ser de 50 euros aproximadamente y si el cliente prefiere contactar con otra empresa diferente, la tarifa que se establece es libre y dependerá de lo que acuerden ambas partes.

En cualquier supuesto, el coste de la inspección siempre se paga a través de la factura de gas de la compañía comercializadora, por lo que el consumidor no tiene que preocuparse de abonar ninguna cantidad en metálico. Incluso cuando se han contratado los servicios de otra empresa, el pago se gestiona a través de la distribuidora.

Para evitar estafas, es conveniente prohibir el paso al domicilio a cualquier persona que se presente de improviso para realizar el mantenimiento de la caldera o de la instalación de gas y que no cuente con la identificación o acreditación correspondientes. Casi siempre, la fecha y hora de las visitas técnicas se acuerdan previamente con el cliente, por lo que es fundamental desconfiar de todo lo que se salga de estas pautas.

 

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