Consejos para quitar el óxido del baño

Índice de contenidos

• Consejos para quitar el óxido del baño
• ¿Por qué se produce el óxido?
• Quitar manchas de óxido con bicarbonato
• Quitar manchas de óxido con lejía
• Quitar manchas de óxido con vinagre
• Otros productos naturales para limpiar las manchas de óxido
• Conclusiones finales

Consejos para quitar el óxido del baño

Es bastante habitual que, con el paso del tiempo, todos los elementos del baño empiecen a presentar diferentes tipos de manchas. En un principio pueden pasar más o menos desapercibidas, pero si no se pone remedio cuanto antes, es posible que lleguen a estropear por completo el aspecto impoluto que debe primar en este espacio.

El óxido es un problema bastante común en la mayoría de las bañeras o duchas, lavabos y retretes. Por suerte, existen diferentes remedios con los que se consigue eliminar esta suciedad y recuperar la apariencia original de todas las piezas.

¿Por qué se produce el óxido?

El baño es la estancia de la casa donde se dan las condiciones óptimas para el desarrollo del óxido. Este tipo de manchas es el resultado de la corrosión que provoca el agua cuando permanece en contacto directo con los elementos de metal durante largos periodos de tiempo.

El servicio es uno de los espacios que se utilizan continuamente y que, además, suele tener un ambiente húmedo. Estos factores son determinantes en la formación de este compuesto, lo cual se acentúa aún más cuando las superficies de las distintas partes no llegan a secarse por completo.

Las principales causas que provocan la aparición de óxido en nuestro baño son la calidad y dureza del agua, la expansión del óxido desde alguna pieza de la bañera o inodoro, alguna fuga recurrente a causa de alguna incidencia en las tuberías, o restos de productos de higiene, como la crema de afeitar o jabón de manos, que no se hayan limpiado con la suficiente rapidez. Lo importante es actuar tan pronto como sea posible para evitar que esta suciedad se propague por el baño.

Quitar manchas de óxido con bicarbonato

El bicarbonato de sodio es uno de los componentes básicos de un remedio casero infalible para eliminar el óxido del baño. Para ello, tan solo hay que mezclar una cucharada de este producto con otra de cremor tártaro, que es un ácido carboxílico que se obtiene en la producción del vino, y el zumo de un limón.

Una vez mezclados todos los ingredientes es necesario conformar una pasta consistente. Con esta masilla se cubre por completo la mancha de óxido y se deja actuar durante una hora como mínimo. Después, se debe utilizar un cepillo para frotar la zona y enjuagar con agua fría. Si la mancha no ha desaparecido, se debe repetir otra vez el mismo proceso.

El bicarbonato es un producto muy utilizado en las tareas de limpieza gracias a su gran poder desinfectante. Incluso se puede utilizar solo o mezclándolo con limón para eliminar las manchas de moho que aparecen en las juntas de los azulejos de la ducha. Aplicando este consejo, en cuestión de minutos puede verse cómo la pared vuelve a relucir como nueva.

Quitar manchas de óxido con lejía

La lejía siempre suele ser la solución a la mayoría de los problemas de suciedad. En el caso del óxido en el baño también se puede utilizar, garantizando un resultado excelente. No obstante, se debe tener un especial cuidado al manipular este producto debido a la peligrosidad de sus componentes químicos. Recuerda utilizar guantes en todo momento y evitar el contacto con la piel.

Si se trata de manchas que están muy incrustadas en la superficie desde hace tiempo, lo más recomendable es añadir una cantidad abundante de lejía y dejar que actúe durante 10 horas aproximadamente. En todo este tiempo no se debe utilizar el baño hasta que haya conseguido hacer efecto. En el momento de enjuagar, es preciso frotar con un paño húmedo para eliminar por completo el óxido.

Quitar manchas de óxido con vinagre

Al igual que el bicarbonato de sodio, el vinagre es un producto casero que presenta una gran capacidad limpiadora. En realidad, suele causar el mismo efecto que el zumo de limón, por lo que se puede utilizar cualquiera de estos líquidos de forma indistinta. En este último caso, para conseguir una mayor eficacia, es aconsejable mezclar el jugo con sal de cocina.

Para eliminar las manchas de óxido es necesario verter una cantidad abundante de vinagre o bien humedecer un paño y aplicarlo sobre la zona afectada. Después de dejar que actúe, se debe frotar con fuerza para dejar la superficie impoluta. Además de combatir las manchas de óxido, posee un gran componente antical, con lo que conseguirás una doble limpieza.

Puedes utilizar productos naturales para deshacerte de las manchas de óxido.

Otros productos naturales para limpiar las manchas de óxido

Otras alternativas naturales que ayudan a la eliminación de las manchas de óxido son la sal y el zumo de limón. Los ácidos del jugo de limón ayudan a limpiar diferentes materiales, tales como textiles, cerámicas, o plásticos, entre otros. Si además se combina con el bórax, la limpieza está garantizada. Puedes conocer más sobre este compuesto en nuestro post sobre el bórax y sus múltiples usos en el hogar.

El uso de sal para deshacernos de las manchas de óxido permite también blanquear la bañera y aquellas superficies de mármol claro que tengamos en nuestro baño. Bastará con mezclar la sal con vinagre o zumo de limón y frotar suavemente la zona afectada por el óxido con un paño fino para librarnos de las manchas y conseguir que nuestro aseo brille. 

La piedra pómez, además de ayudar al cuidado de nuestra piel, puede ser una gran aliada contra las manchas de óxido. En vez de utilizar un cepillo convencional, puedes humedecer la piedra pómez y frotar suavemente la superficie afectada, evitando ejercer demasiada presión para no llegar a dañar la porcelana. Puedes repetir el proceso una segunda vez añadiendo de nuevo mezclas naturales de zumo de limón o vinagre blanco.

Conclusiones finales

Al poner en práctica cualquiera de estos métodos, es importante esperar el plazo de tiempo que sea necesario y no utilizar el aseo hasta que haya hecho efecto. De igual manera, recuerda utilizar guantes en todo momento para proteger tus manos de mezclas que pueden resultar abrasivas para la piel. Te recomendamos terminar el proceso de limpieza utilizando un paño seco sobre la superficie porcelánica y próxima a las fuentes de agua. La clave para evitar que aparezcan este tipo de manchas es realizar una limpieza adecuada y evitar cualquier acumulación de agua en un tiempo prolongado. Presta atención a cualquier indicio de óxido y conseguirás mantener tu baño reluciente.

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