¿Qué son las casas bioclimáticas?

Indice de contenidos

• ¿Qué son las casas bioclimáticas?
• Bases de las construcciones bioclimáticas
• ¿Qué se consigue con las casas bioclimáticas?

¿Qué son las casas bioclimáticas?

El diseño de edificios que tienen en cuenta las condiciones climatológicas del lugar donde están ubicados puede sonar a utopía. Sin embargo, en la actualidad es una realidad y recibe el nombre de casas bioclimáticas. El sol, la lluvia, el aire, el viento o la vegetación son recursos naturales que no se pueden desaprovechar en el sector de la arquitectura sostenible, ya que tienen un enorme potencial como fuentes de energía.

Por lo tanto, una casa bioclimática es una construcción que reúne unas características particulares en función del entorno de que se trate. El objetivo fundamental es optimizar los recursos disponibles que ofrece la naturaleza para reducir el consumo de energía y, como consecuencia, disminuir el impacto al medio ambiente.

Aunque no es una corriente demasiado extendida todavía, en España es posible encontrar actualmente algunos ejemplos de arquitectura bioclimática. Teniendo en cuenta que el clima es muy diverso en los diferentes puntos de la geografía nacional, las viviendas deberían ser distintas en cada región. En Galicia se puede aprovechar a la perfección su clima húmedo; en Andalucía, la temperatura templada en invierno y cálida en verano; en Valencia, el tiempo mediterráneo, etc.

Bases de las construcciones bioclimáticas

Además de aprovechar los recursos que brinda el entorno, los materiales de las casas bioclimáticas también se suelen extraer del medio natural. Junto a estas particularidades, destacan otras:

La orientación de las casas bioclimáticas debe ser la adecuada para aprovechar al máximo las horas de sol, sobre todo en los lugares con un clima más lluvioso. Para hacer un uso eficiente de esta energía es preciso que los rayos lleguen hasta la estructura, donde se suelen colocar placas solares para llevar a cabo la conversión en electricidad limpia.
Por el contrario, en las zonas muy cálidas, es preciso incorporar una protección frente a las altas temperaturas. Para conseguir un mayor confort, el edificio se envuelve a través de una serie de técnicas específicas que tienen una alta capacidad aislante y hermética.
Por su parte, la energía solar no solo se utiliza a modo de calefacción en invierno o para conseguir electricidad a través de las placas. El sol constituye la mejor iluminación natural que se puede tener en cualquier casa. Por ello, una orientación idónea y las aberturas en los puntos concretos permiten disfrutar de esta luz durante todo el año.
En las casas bioclimáticas, los sistemas de ventilación utilizan la energía del aire para incrementar el nivel de salubridad en el interior de la vivienda y ahorrar en costes. Para ello, se suele elegir una localización estratégica donde el viento alcance una mayor velocidad.
Los materiales que se utilizan en este tipo de construcciones normalmente son reciclados. En otro caso, se garantiza que en su proceso de extracción y/o manipulación no se utilicen componentes tóxicos y que se respeten unos niveles máximos de gasto de energía. Con esto se busca un mínimo impacto contaminante al planeta durante todo el proceso de levantamiento del inmueble.
En la mayoría de las ocasiones, las casas bioclimáticas suelen estar emplazadas en plena naturaleza. Esto permite que se pueda aprovechar la vegetación existente para reducir el uso de energía en la vivienda. Es el caso por ejemplo de los árboles que se utilizan para dar sombra en verano.
Respecto a la decoración del interior, todos los elementos siguen la misma línea de bajo consumo de recursos. Por ello, tanto los toldos como las ventanas aislantes son unos componentes imprescindibles en este tipo de diseños. Cuando se producen picos de temperatura, tanto alta como baja, es posible mantener un ambiente agradable en el interior si se utilizan las piezas adecuadas.
Normalmente, el diseño de las casas bioclimáticas se suele realizar de tal modo que se garantice la ventilación cruzada. Del mismo modo, los patios interiores son un espacio fundamental para permitir que los rayos del sol lleguen a todas las estancias.

¿Qué se consigue con las casas bioclimáticas?

Aunque las viviendas bioclimáticas puedan parecer algo muy novedoso, en realidad están basadas en el modo de vivir original. Antes de que existieran los sistemas de climatización en las casas, las construcciones estaban enfocadas en aprovechar al máximo el entorno para conseguir el mayor confort. Y eso es precisamente lo que recupera este tipo de arquitectura.

Todo parece apuntar a que el futuro de la arquitectura sostenible irá orientado hacia esta visión por las múltiples ventajas que ofrece, tanto a nivel de bienestar como de respeto al medio ambiente. Teniendo en cuenta que la sociedad cada vez más busca un enfoque sostenible, las casas bioclimáticas se edifican a través de estructuras que originan el menor daño posible, tanto durante el proceso de construcción como durante el periodo de habitabilidad.

La consecuencia es la conformación de un hogar donde se puede disfrutar de una comodidad total sin necesidad de utilizar los sistemas de aire acondicionado o calefacción modernos. De este modo, los inquilinos también se benefician de un entorno más saludable y de un ahorro considerable.

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