¿Por qué elegir ventanas de PVC?

Indice de contenidos:

• Ventajas de las ventanas de PVC
• Desventajas de las ventanas de PVC
• ¿Cuáles son las mejores ventanas?

Las ventanas de PVC son unas de las más extendidas en la actualidad en comparación con otros materiales, como la madera o el aluminio. En la construcción de una vivienda nueva o cuando se acomete una reforma importante, elegir el tipo de ventana es una de las cuestiones más significativa, no solo respecto al tamaño o la ubicación, sino sobre todo por los componentes que garanticen un buen aislamiento, tanto acústico como térmico.

Ventajas de las ventanas de PVC

• Una de las propiedades más interesantes de este tipo de material es su gran capacidad aislante. En comparación con otros, el PVC es la mejor opción que se puede elegir hoy en día para mantener el silencio y una temperatura homogénea dentro de casa. A largo plazo, esto repercute en una mayor tranquilidad y en un ahorro de energía considerable.

• Lejos de lo que se tendía a pensar hace algunos años, el policluro de vinilo es bastante respetuoso con el medio ambiente. Durante su proceso de fabricación apenas se desprenden sustancias tóxicas y, además, se puede reciclar para producir nuevos elementos.

• La seguridad es otra ventaja importante de las ventanas de PVC, ya que con sus diferentes niveles de protección antirrobo son casi imposibles de abrir desde fuera y son muy resistentes frente a posibles golpes o daños.

• Se caracterizan por tener una vida útil bastante larga, llegando a durar intactas durante 50 años. Este material se mantiene impasible ante las inclemencias del tiempo, así como ante la corrosión que provocan los ambientes salinos de las zonas costeras. A esto hay que añadir que no es un material inflamable.

• Su mantenimiento exterior es muy sencillo: solo es necesario pasar un paño con agua y jabón para que las ventanas queden relucientes. Esta es una clara ventaja frente a la madera, por ejemplo, que necesita unos cuidados más específicos.

• A diferencia de otros materiales, el PVC cumple a la perfección con las nuevas normativas de eficiencia energética en los edificios gracias a su capacidad de aislamiento sin necesidad de instalar perfiles demasiado grandes.

• La estética va unida a este tipo de ventanas, por lo que se pueden instalar en cualquier vivienda, independientemente del estilo. Su color suele ser blanco que aporta sobriedad y elegancia al mismo tiempo, aunque también se pueden encontrar otros tonos y acabados, combinándolos con distintos tipos de aperturas.

• Presentan una estanqueidad superior frente al agua y, al mismo tiempo, son totalmente resistentes a la condensación que se suele producir en invierno por la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior.

Desventajas de las ventanas de PVC

• El principal inconveniente de las ventanas de PVC es el elevado precio en comparación con otros tipos. Sin embargo, es necesario aclarar que la calidad siempre tiene un coste mayor.

• Para muchas personas, el abanico de estilos es aún limitado, pero con el paso del tiempo esta desventaja está cambiando para ofrecer a los usuarios una amplia gama de opciones dentro del mismo material.

• El grosor de los perfiles puede considerarse que es mayor que en las ventanas de aluminio, pero debe tenerse en cuenta que, para beneficiarse de un correcto aislamiento, es necesario colocar un buen cristal que en la mayoría de las ocasiones es doble.

¿Cuáles son las mejores ventanas?

Aunque la diferencia de precio entre el PVC y otros materiales conlleve a decantarse por alternativas diferentes, según los expertos, las mejores prestaciones se encuentran en el primero, ya que la relación entre calidad y coste no tiene competencia.

En el caso del aluminio, al tratarse de un metal conductor del frío y del calor, es obvio que la capacidad de aislamiento se reduce de forma notoria, trasladándose al interior la temperatura de fuera. Para minimizar este problema, es necesario instalar láminas de material aislante en la estructura del perfil del aluminio, lo que conlleva a posibles desperfectos como consecuencia de esta manipulación y un incremento en el precio para convertirse en aluminio RPT (Rotura de Puente Térmico).

Sin embargo, el PVC es un material con muy baja conductividad térmica, llegando incluso al punto de considerarse un material aislante sin necesidad de añadir ningún componente. El único proceso que se requiere es la colocación del cristal, por lo que las posibilidades de que aparezcan fallos se reduce a cero.

En definitiva, podría decirse que las mejores ventanas son las de PVC, seguidas de las de madera y, por último, las de aluminio, siempre que en este último caso cuenten con los estándares de aislamiento térmico de Rotura de Puente Térmico (RPT) como hemos comentado.

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