Refuerzo de hormigones y morteros con fibra.

Publicado el : 09/03/2016 14:27:59
Categorías : Albañilería , Construcción

Indice de contenidos:

¿Cómo aumentar la tenacidad y resistencia en hormigones y morteros?

De todos es bien sabido que el hormigón es considerado como uno de los materiales universales en el sector de la construcción. En este post vamos a hablar en concreto de las soleras de hormigón, qué son, para qué sirven y sobre todo cómo deben ejecutarse correctamente para conseguir un acabado óptimo y profesional. La solera de hormigón es un elemento no estructural que se utiliza para construir sobre el suelo una superficie firme y horizontal bien sea como acabado definitivo o como base para colocar encima otros tipos de pavimento. Como hemos dicho anteriormente las soleras de hormigón no tienen una misión estructural por sí mismas lo que hace imprescindible tener que reforzar dicha solera con el fin de dotarla de cierta estructura. Hasta hace bien poco esto se conseguía mediante la introducción en el hormigón de un armado que consiste básicamente en la introducción de la clásica malla de varillas electrosoldadas.

Mallazo de tetracero para refuerzo de hormigones

Mallazo de tetracero para refuerzo de hormigones

Sin embargo, fruto de la innovación tecnológica, hoy en día tenemos la opción de emplear un nuevo producto: el Sikafiber® M-12 se trata de una fibra monofilamento de polipropileno diseñada para ser mezclada con hormigones y morteros con el fin de aumentar su durabilidad y evitar la fisuración.

Estas fibras compuestas de polipropileno virgen tienen la ventaja de que al añadirse a la mezcla se expanden homogéneamente y de forma tridimensional, lo que significa que son capaces de distribuir de manera uniforme las tensiones de la masa y con ello disminuir la formación de fisuras y la aparición de los consiguientes puntos débiles. Reducen también de forma considerable el riesgo de aparición de fisuras por retracción y, llegado el caso, minimizan la propagación de las mismas. El hecho de que estas fibras de polipropileno contribuyan a reducir al máximo el riesgo de fisuras se traduce de forma automática en un aumento de la impermeabilidad del hormigón.

Bolsa de fibras de polipropileno SikaFiber® M-12.

Bolsa de fibras de polipropileno SikaFiber® M-12.

Gracias a que las fibras de polipropileno se distribuyen de manera homogénea la compactación del hormigón se torna máxima, aumentando la resistencia del material a los impactos y reduciendo su fragilidad. También mejora la resistencia del hormigón a la compresión y a la tracción. Como es lógico esta mayor resistencia se traduce en un notable incremento de la durabilidad del material. De hecho las fibras de polipropileno multifilamento cada vez están siendo más utilizadas como complemento del mallazo de acero tradicional cuya función se limitaba a absorber las tensiones que tienen lugar durante el proceso de fraguado y endurecimiento del hormigón. Tanto el hormigón como el mortero reforzados con este tipo de fibras multifilamento se emplean principalmente en áreas muy expuestas a la humedad o a la contaminación. También se aplica en aquellas superficies que, debido a la naturaleza de la actividad para la que están destinadas, sufren un uso tan intenso y continuado que terminan por presentar un rápido y excesivo deterioro. Me refiero a sitios como centros deportivos, plantas de procesamiento o almacenamiento, naves industriales, granjas… y un largo etcétera.

Fibras de polipropileno para refuerzo de hormigones

Fibras de polipropileno para refuerzo de hormigones

Por lo tanto, este innovador producto está especialmente indicado para su uso en losas de hormigón (soleras y forjados), pavimentos de hormigón, hormigón y mortero proyectado, morteros, revocos de fachadas, elementos prefabricados y revestimiento de canales. En cuanto a los costes sé que muchos en este mismo momento estaréis pensando que sí, que suena muy bien pero que el precio seguro que resulta desorbitado. Pues tengo que deciros que os equivocáis porque el coste de emplear este sistema es muy económico dado que tan sólo necesitamos una bolsa de 600 gramos por cada metro cúbico de hormigón.

Con el uso de fibras de polipropileno conseguiréis una garantía total en vuestros trabajos aumentando la tenacidad y resistencia del soporte. La preparación de la mezcla no puede ser más sencilla. Se mete la bolsa cerrada a la hormigonera en cualquier momento del proceso de mezclado o al final del mismo pero nunca directamente sobre el agua antes de haber agregado el resto de componentes. Una vez introducida la bolsa en la hormigonera se amasa durante al menos 5 minutos, tiempo más que suficiente para que la bolsa se deshaga. Listo. Este producto de gran calidad a base de fibras de polipropileno no sólo reforzará al máximo tus mezclas de hormigón o mortero sino que además conseguirás que tus trabajos presenten un acabado profesional, más resistente y duradero.

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