Cómo desatascar un fregadero.

Publicado el : 03/07/2015 12:27:02
Categorías : Bricolaje , Trucos de bricolaje

Indice de contenidos:

Métodos para desatascar un fregadero.

Los atascos en las tuberías de los fregaderos son causados tanto por la acumulación de restos de comida como del uso excesivo de agentes limpiadores y lavavajillas. En general las cocinas que vienen equipadas con lavadora y lavavajillas comparten con el fregadero la misma tubería de evacuación de agua sucia, por lo que es común que tarde o temprano se produzca una obturación de dicha tubería.

Fregadero

Desatascar un fregadero

Los atascos de fregadero más comunes se deben a la acumulación rápida de residuos como, por ejemplo, cuando lavamos una gran cantidad de platos después de una reunión familiar o cuando fregamos cazuelas, sartenes o bandejas de horno con restos de comida quemada. En estos casos se termina formando una costra que no se dispersa en el agua, siendo muy habitual que con el paso del tiempo acabe provocando un buen atasco en nuestro fregadero.

Una buen prevención, es vaciar bien de residuos sólidos en la basura los platos antes de meterlos en el fregadero, así como contar con una rejilla de quita y pon, sobre el agujero de desagüe que evite que los residuos más grandes puedan ser arrastrados por el agua al interior de la tubería.

Si tenemos en cuenta que las tuberías de los fregaderos suelen oscilar entre los 32 y los 40 mm de diámetro, es muy fácil que se atasquen debido a la sedimentación de la suciedad en las paredes de dichas tuberías. Los atascos causados por sedimentación son más complicados de solventar debido a que son tapones compactos y bien agarrados a las paredes de la tubería que, además, se van formando durante largos periodos de tiempo. Los restos de materia orgánica en descomposición, junto con la cal del agua y los productos detergentes que empleamos para lavar los platos, llegan a crear una masa compacta de aspecto jabonoso que se suele acumular en los codos de las tuberías o en el sifón. A continuación vamos a explicar varios métodos para desatascar un fregadero y las herramientas que podemos necesitar para ello.

Todas las herramientas necesarias para desatascar un fregadero:

  • Desatascador de ventosa: Muy eficaz para atascos ocasionales producidos en el fregadero por una acumulación rápida de restos de comida.
  • Desatascadores líquidos: Ideales para atascos puntuales de fregaderos por acumulación de materia orgánica como restos de comida, pelo, etc. Se trata de un producto de acción lenta que puede tardar varias horas en hacer su efecto y desatascar la tubería. En el caso de atascos graves producidos por sedimentación, los desatascadores líquidos suelen resultar poco efectivos.
  • Sosa cáustica: Producto químico de acción abrasiva y elevado poder de limpieza en el caso de tuberías o cañerías atascadas. No es recomendable su utilización para desatascar tuberías de metal antiguas ni en lugares con escasa o nula ventilación.
  • Desatascador de muelle: Herramienta muy práctica a la hora de remover tapones de sedimentación. Suele ser efectiva aunque a veces no cumple su cometido dado que puede empujar el tapón de residuos más profundamente.

Cómo eliminar un atasco en un fregadero:

La tarea de desatascar un fregadero puede llevarnos desde unos pocos minutos a varias horas, dependiendo de la gravedad del atasco y el método que empleemos para eliminarlo. También es posible que, dependiendo de la gravedad del atasco existente en la cañería, un método no resulte efectivo y tengamos que probar con otro hasta que demos definitivamente con el método más adecuado para eliminar el atasco.

En cualquier tubería de desagüe, hay ciertos puntos críticos en los que se puede haber producido el atasco, como son el sifón y los codos. Si estos son accesibles, es posible que antes de ponernos a emplear ninguno de los métodos de desatasco que citamos a continuación, cortemos el agua, y desmontemos estos puntos problemáticos para comprobar si está aquí el atasco.

Esquema tuberías fregadero.

Esquema genérico de tuberías del desagüe de un fregadero.

Paso 1 Comenzaremos empleando un desatascador de ventosa puesto que resulta muy útil para los atascos puntuales producidos por acumulación rápida de suciedad y, además, su uso es muy sencillo. Si nuestro fregadero dispone de rebosadero debemos taparlo con un paño o un trapo que, a su vez, cubriremos con una bolsa de plástico para que el cierre del respiradero sea más efectivo. A continuación cogemos el desatascador de ventosa y, con el fregadero mediado de agua, procedemos a bombear el agua mediante la realización de movimientos repetitivos. Cuando el atasco no es grave, unos pocos bombeos son suficientes para disolver el tapón y desatascar la tubería.

Paso 2 Si el método del desatascador de ventosa no funciona, esperaremos a que el agua del fregadero se suma lentamente hasta que quede completamente vacío. Calcularemos cuánto tiempo ha tardado el fregadero en vaciarse y esperaremos ese mismo intervalo para asegurarnos de que el tramo de cañería que hay hasta donde se encuentra el tapón se ha vaciado también. En este punto podemos probar, siguiendo rigurosamente las instrucciones del fabricante, con desatascadores químicos que podemos encontrar tanto en formato líquido como en gel. Una vez transcurrido el tiempo recomendado para que el producto surja efecto, abriremos el agua para comprobar si el tapón se ha disuelto.

Paso 3 El empleo de sosa cáustica sólo es recomendable en el caso de tuberías nuevas que ofrezcan una buena resistencia al efecto abrasivo de la sosa en contacto con el agua. La sosa cáustica produce una potente reacción cuando se le añade agua hirviendo, por lo que es recomendable emplear guantes y gafas protectoras. Para un uso efectivo pondremos un par de puñados de sosa caústica en la boca del fregadero y añadiremos inmediatamente agua muy caliente, por lo que debemos apartarnos para evitar salpicaduras.

Paso 4 Si aún así el tapón persiste, emplearemos métodos mecánicos como un desatascador de muelle. Este tipo de desatascador lo podemos encontrar en diferentes longitudes y su funcionamiento es similar al de una barrena. Al introducirlo en la cañería debemos empujarlo hasta que notemos que alcanzamos la obstrucción. En este punto continuaremos haciendo presión a la vez que giramos su empuñadura. De este modo el muelle desatascador va perforando el tapón y, tras repetidos intentos, el tapón termina desmenuzado en trozos más pequeños que puede ser evacuados fácilmente a través de la tubería.

Paso 5 En ocasiones el tapón puede ofrecer la suficiente resistencia como para no poder ser perforado por el desatascador de muelle. También puede darse el caso de que la obstrucción esté localizada en un punto lejano e inaccesible para esta herramienta por lo que, en estos casos, la única solución que nos queda es emplear el sistema de ariete que en mi opinión es el más efectivo de todos.

El sistema de ariete resulta un método perfecto para aquellas viviendas que dispongan de una buena presión de agua. No es muy complejo de realizar pero requiere de un poco de tiempo para su preparación. Básicamente consiste en introducir agua a presión en la tubería hasta que se libere el atasco pero, para hacerlo correctamente y de forma efectiva tenemos que seguir ciertas pautas. Lo primero es asegurarnos de que la salida de agua sucia del fregadero no tiene bifurcaciones tales como una conexión para la salida de agua sucia procedente de lavadoras o lavavajillas. Si fuera así las condenaremos mediante tapones roscados con teflón, con lo que evitamos que el agua llegue a los electrodomésticos. Una vez condenadas las posibles bifurcaciones conectaremos nuestra manguera a la boca de la tubería atascada, empleando para ello un casquillo adaptador de la medida de la tubería a la medida de la manguera.

Para conseguir una mayor efectividad, tanto las uniones de la manguera como los tapones y racores empleados deben ser estancos, por lo que nos aseguraremos de utilizar teflón y verificar que no existan fugas. A continuación abriremos rápidamente el paso de agua. Es conveniente que la manguera tenga un recorrido de varios metros ya que, al haber más cantidad de agua circulando, el golpe de ariete es más fuerte y desatasca más fácilmente la tubería.

Conclusiones.

Hemos explicado varios métodos para desatascar fregaderos. En ocasiones lo conseguiremos al primer intento pero en otras no. Y es que, dependiendo del nivel de atasco que tengamos, nos veremos obligados a recurrir a uno u otro método hasta que finalmente eliminemos el problema que lo ha causado.

Recuerde también, que si el atasco es demasiado complicado y ve que con los métodos tradicionales no ha conseguido ningún avance, es preferible recurrir a un fontanero profesional antes de arriesgarnos a causar daños en nuestra instalación.

Share